Marca personal y mujer

En pleno siglo XXI es necesario e importante poner en valor la marca mujer por sí misma y darle mayor visibilidad pues a estas alturas todavía existen muchos desafíos, muchos miedos y muchas situaciones que impiden activar el empoderamiento femenino con toda la fuerza que la sociedad necesita. Para identificar todos esos retos a los que se enfrenta una mujer y que repercuten en su marca personal, citamos en el cibermaratón de marca personal a tres mujeres, tres luchadoras, tres profesionales de España y Colombia, que gracias a su experiencia personal y a su bagaje en el terreno de la marca personal analizaron a fondo la importancia que tiene poner en valor todo esto.

Las invitadas que participan en esta charla que me ayudó a moderar Ricardo Marí son: Dolores Font Cortés, gerente y encargada del departamento de creatividad de la firma Dolores Cortés especializada en moda de baño, es así la continuadora de una tradición familiar de más de cincuenta años en el diseño y la fabricación de trajes de baño femeninos y creadora del foro de reflexión sobre personal branding Marca Personal Valencia; María A. Sánchez, técnico superior en asesoría de imagen especializada en identidad visual, la parte visible de la marca personal, consultora para altos directivos de empresas nacionales e internacionales y autora del libro ‘NO Imagen: Marca personal, salud y belleza científica’ y Raquel Gómez, abogada, diplomada en marketing, coach, conferencista y presentadora de televisión, diplomada en gerencia del servicio, liderazgo y conciencia femenina, etiqueta, protocolo, imagen y relaciones públicas, fue nominada a mujer exitosa por la revista Económica y Mujer Bit 2011 por la revista Aló, además es autora del libro ‘Cómo vender su marca personal’.

Al final de esta entrada encontrarás disponible tanto el vídeo íntegro que cuenta con subtítulos en castellano como el podcast, para que puedas ver o escuchar la charla ‘Marca personal y mujer‘ que mantuvimos con ellas en HangoutNEO y que nos dejaron aportaciones y experiencias tan interesantes como estas.

¿Cómo definen la marca personal estas tres mujeres?

Imagen personal, refuerzo de la marca personal

Un debate de altura que se precie, no es un debate si no hay un punto de controversia y un buen repertorio de recomendaciones. En esta cibermesa hubo ambas cosas y es que cuando se habla de la marca mujer sale a relucir muy pronto la imagen personal y la necesidad de que sea coherente con la marca personal que la persona desea transmitir pero a veces entran otros componentes solo por el hecho de ser mujer.

De esta forma María A. Sánchez, especialista en imagen personal que aboga por la sencillez y la neutralidad en la imagen y se declara enemiga del artificio, lanzó un consejo vital para las mujeres profesionales «una cosa que yo recomendaría es no intentar ser una copia del hombre porque para bien o para mal estamos en el mundo profesional hace muy pocos años, 50 frente a 200, pero por otro lado hay que llevar cuidado con los símbolos que son distractores como puede ser unos pendientes que se mueven, una melena que se toca, unos elementos brillantes, todo aquello que distorsione el mensaje. Que cuando nos miren esté claro que somo una persona que va a trabajar«. 

Si bien tanto Dolores como Raquel demostraron su conformidad con María en esta necesidad de poner en valor a la mujer profesional también desde la imagen, su punto de vista dista de esa neutralidad en el mensaje. «Yo pienso que incluso el arete, la ropa, el pañuelo, lo que la persona quiera agregarle a la marca personal, si va en sintonía con lo que ella argumenta, pregona, es embajadora de una marca X o Y, es una oportunidad además de ser congruente y consistente y mientras haya esa congruencia y esa consistencia, me parece que cada mujer puede poner con sencillez y respeto ese toque especial en su marca mujer. Creo que las mujeres y lo lindo de esto es esa diversidad porque cada marca personal mujer puede poner ese sello de creatividad, de su gusto personal, de cómo se siente cómoda ella si va acorde con una argumentación, con una consistencia clara de su discurso, de lo que pregona, de su trabajo«, aseguró Raquel Gómez.

Por su parte Dolores Font fue más allá y afirmó que si bien todo es importante y tanto la ropa, la cosmética, los complementos, etcétera están ahí para ayudarnos a comunicar, lo importante es realizar una introspección personal que nos ayude a saber cómo combinar imagen y marca personal para que los demás nos vean realmente como somos «pienso que nosotros primero debemos de saber qué es lo que somos, cuál es nuestra identidad y luego saber cómo eso mostrarlo al exterior, a los demás, entonces sí que tenemos una marca real» y en este punto Dolores insistió en que «hay que saber distinguir entre lo que es vestirse y lo que es disfrazarse, entre lo que es maquillarse y lo que es pintarrajearse. Para ello tenemos que saber nuestras fortalezas y nuestras debilidades, hacer un análisis sobre nosotras como personas y también cara a nuestra imagen«.

 Consejos para poner en valor la marca mujer

En la cibermesa salió a relucir una característica natural de la mujer que puesta en valor sirve no solo a la mujer en sí misma si no a toda la sociedad y es la capacidad de ayudar, motivar y empujar a que todo a su alrededor se mueva. «Hay algo muy singular en las mujeres, hay una capacidad ayudadora, hay una capacidad influenciadora natural, hay una capacidad de mentoras, de querer enseñar, de querer transmitir. La mujer termina influenciando finalmente a todo el mundo que hay a su lado» afirmó Raquel Gómez para animar a todas a ponerlo en valor y trabajar más este aspecto.

Una recomendación para todas las mujeres que formuló María A. Sánchez es olvidarnos de una vez por todas del síndrome de la Maripili una terminología que acuño en su día Carmen García Ribas para identificar el miedo de la mujeres a no ser queridas que conlleva el apocamiento y que se infravaloren.

«Siempre he estado a favor de que la mujer lidere, pero cada vez más estoy a favor de que lidere su vida y que no se sienta obligada a demostrar nada a nadie. El síndrome de la Maripili, el miedo a no ser queridas, ese es un gran peligro. Es decir, vístete, habla, actúa, lo que quieras pero no busques la aprobación de los demás» señala María para animar a todas las mujeres a valorarse por sí mismas y no en función de los demás «una invitación a ser completas desde el principio» y para conseguirlo un consejo que lanza es «hablar de pequeños logros, de ser estratégicas en cada momento». Hablando de liderazgo, recomiendo en este punto ver todos los consejos que se dieron en otra de las cibermesas sobre este tema ‘Marca personal y liderazgo‘.

Profundizando en esta línea Raquel Gómez advirtió que «las mujeres somos ayudadoras pero curiosamente a la que menos nos ayudamos es a nosotras mismas, terminamos olvidándonos de nosotras. Ayudamos a todos y nos volvemos víctimas, nos cargamos demasiadas responsabilidades, nos echamos al hombro como la pena de todos en la familia» es por eso que lanzó un mensaje alto y claro para todas «el activo más importante que tienen en la vida son ellas mismas, ellas son la empresa más importante y el activo más importante, lo demás el dinero se puede perder, a veces las relaciones también, puedes quebrar en un negocio, pero tu paquete de talentos y de habilidades, que los tienes y que tienen un diseño divino singular, lo tienes que poner a trabajar y en acción porque ese será para siempre, para toda la vida y lo puedes volver útil para tu vida y para la sociedad también».

Por su parte Dolores Font reafirmó esa necesidad de que las mujeres potencien y creen su autoestima «tú eres importante, tú eres única, puedes ser igual o incluso mejor que los demás, pero nunca eres peor y además tienes las capacidades y el talento que si algo no lo sabes puedes aprender a hacerlo. Tenemos la misma capacidad todo el mundo y para eso hay que ser también un poco valientes, hay que decir: sé valiente, lánzate a hacer cosas».

Esto es algo que trata de inculcar en su día a día ya que tiene a más de 60 mujeres trabajando a su alrededor en su firma de trajes de baño y la experiencia le lleva a afirmar con tristeza que a veces ha echado en falta esta resolución, una falta de arrojo y valentía en algunas mujeres para confiar en sí mismas y desempeñar todo tipo de cosas «parece mentira pero hoy en el siglo XXI ocurre esto». Su receta para potenciar la autoestima y superar estos miedos que a veces se presentan pasa por «la humildad en el sentido de que por equivocarse no pasa nada y es bueno y es normal e insistir mucho también en que nada es posible sin trabajo, todo hay que hacerlo con esfuerzo. Creo que lo que más nos cuesta al final es lo que más nos satisface».

Cómo construyeron estas mujeres sus marcas personales

Como pasar de la teoría a la práctica en ocasiones no es sencillo, quisimos conocer en primera persona cómo construyeron cada una de ellas su camino hacia la mujer profesional que son hoy. Raquel Gómez reconoció que encontrar su propia marca personal le resultó muy, muy difícil «me confundí durante mucho tiempo en el colegio, en la escuela, en la universidad como una persona que no tenía como digamos muy claro su propósito en la vida. Esa pasión clara y definida no la tenía tan clara en la visión profesional entonces fue una búsqueda y fue una crisis personal en el mundo del trabajo la que me obligó realmente a hacer una junta directiva personal seria sobre mí misma y saber cuál era realmente mi contribución en una compañía, en el mundo, a la sociedad«.

El caso de Dolores Font a la hora de construir su marca personal pasa por su inquietud innata por aprender todo tipo de cosas y por su necesidad de hacer varias cosas a la vez. Durante toda su vida nunca se ha dedicado a hacer una sola cosa si no que ha combinado varias profesiones totalmente diferentes porque se confiesa una trabajadora incansable.

Ahora ya ha aparcado su profesión como médico y se ha entregado de lleno al negocio familiar de la moda, pero sin dejar de hacer varias cosas a la vez. Es por eso que su caso particular ofrece la visión de una persona que por falta de tiempo material, que no de enfoque ni de ganas, ha tenido que renunciar a hacer determinadas cosas que le hubieran encantado poder llevar adelante y al final ha conformado su marca personal a base de renunciar a partes del todo.

«Yo me he preocupado más por formarme internamente como persona por un lado y por otro lado también como profesional lo que pasa es que ahí tengo un problema muy grande y es que a mí me gusta todo, o sea, desde jovencita soy una persona que mi grave problema es que hay que elegir, ese ha sido un poco mi hándicap, lo que siempre me ha preocupado, el decir tantas cosas interesantes y tantas cosas bonitas que hay para hacer y que si me lo propongo pues podría llegar a hacerlo pero como no se puede hacer todo en esta vida tienes que ir separando, tienes que ir apartando y tienes que ir haciendo y esa ha sido un poco mi tristeza» reconoce Dolores.

Por su parte María A. Sanchez reconoció que para construir su marca personal se rodeó de grandes profesionales que fueron muy generosos con ella compartiendo todo su conocimiento y optó desde el inicio por la marca personal neutra «por la no comunicación antes de hablar» y para ello sustenta todos su pasos aplicando un triple filtro «cada vez que voy a abrir la boca, cada vez que voy a transmitir cualquier cosa que tenga que ver conmigo lo embullo del famoso triple filtro de Sócrates que lo que viene a decir es que cada vez que vayas a hacer o decir algo procura se sea cierto, es decir, entérate que sea cierto antes de decirlo, que sea bueno para la persona a la que lo vas a decir y sobre todo que sea útil«.

Tres mujeres, tres historias diferentes pero un mismo mensaje para empujar a las mujeres a despertar: confianza en una misma para ser valiente y poner en valor la marca mujer.

Si te ha gustado puedes dejarme abajo un comentario y compartir la entrada, el vídeo o el podcast para que otros también puedan disfrutarlo. ¡Gracias!